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Quiénes somos

Nuestro objetivo es ofrecer asesoramiento jurídico y económico a empresas y particulares. Nuestro equipo de trabajo está formado por abogados/as y economistas que trabajan conjuntamente, ofreciendo un servicio integral.

Kide Aholkularitza fue fundada en 2008. Constituimos la cooperativa a partir de la fusión de dos asesorías. En la actualidad contamos con dos oficinas: una en Donostia, en Gipuzkoa, y otra en Leitza, en Navarra. Nos dirigimos principalmente a los pequeños clientes: autónomos/as, pymes, cooperativas, asociaciones y similares.

ASESORAMIENTO INTEGRAL

Trabajamos en equipo con los clientes desde el nacimiento de la idea, incluyendo el diseño y desarrollo del negocio, gestionando las fases de crecimiento y difusión, y colaborando en los procesos de cierre o regeneración en caso de ser necesario. Ofrecemos asesoramiento especializado en cada una de las fases de cada proyecto en los ámbitos económico, financiero, legal y organizativo, ofreciendo a nuestros clientes todas las herramientas y conocimientos para lograr el éxito. De esta manera, nuestros clientes pueden trabajar con total tranquilidad, sabiendo que tienen detrás un grupo de profesionales que les apoyarán y asesorarán en todas las fases de la empresa o proyecto.

UN SERVICIO ADECUADO A TU CASO

Tratamos de entender las necesidades de cada cliente para poder atenderlas adecuadamente. Ofrecemos un servicio flexible que se adapta a cada situación, ya que nuestra labor consiste en asesorar y ayudar en todas las obligaciones administrativas, para que tú solo te ocupes de tu negocio.

ECONOMÍA SOCIAL

Creemos en la economía social y, por ello, promovemos cooperativas, asociaciones y otras, muy arraigadas en Euskal Herria. Debido a que han formado parte de nuestra andadura desde el comienzo, hemos tenido la oportunidad de profundizar en sus peculiaridades y de adquirir conocimientos.

EUSKERA

El equipo de trabajo es 100% euskaldun y todos estamos en condiciones de prestar el servicio en euskera, ya sea un asunto jurídico, laboral o fiscal.
El euskera, además de ser una lengua, genera un vínculo emocional y cultural que es muy importante en las relaciones. Entre quienes dominan el euskera se crea una conexión especial que hace aumentar la cercanía y la confianza.